El magnesio ayuda al funcionamiento de los músculos, los nervios y el corazón. También fortalece los huesos, regula el azúcar en sangre y participa en la producción de energía. Es un mineral esencial para combatir el cansancio, calambres o estrés, especialmente en estilos de vida activos.

Las semillas de calabaza encabezan la lista de alimentos ricos en magnesio. También destacan las espinacas, almendras, anacardos, chocolate negro y legumbres. Incluir estos alimentos ayuda a reducir el cansancio y mejora la función muscular y nerviosa.

La deficiencia de magnesio puede provocar síntomas como calambres musculares, fatiga, irritabilidad, debilidad, dolores de cabeza, mareos, y latidos irregulares del corazón.

El magnesio puede tomarse en cualquier momento del día, aunque es importante mantener una rutina constante. Si se busca mejorar el sueño o la relajación muscular, se recomienda tomarlo por la noche antes de acostarse.